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martes, 21 de abril de 2020

EDUCACIÓN Y BIG DATA




Vivimos en una sociedad tecnológica que nos bombardea con cantidad de información a todas horas. Los datos que se almacenan en la nube suponen un “tesoro” para las empresas privadas y públicas.


La tecnología está al alcance de la mano, de un botón, de una app, de nuestra propia voz ordenando a Siri o a Alexa. Cada vez que activamos la localización nuestros datos estamos transmitiendo información y siempre que de damos a un “me gusta” en las redes sociales, nuestros intereses son compartidos y almacenados.


Las propias tarjetas de crédito, o las tarjetas de fidelización que nos dan puntos o dinero gratuitamente transfieren datos sobre gustos, hábitos de consumo y movilidad.


Pero, ¿estas tarjetas de crédito o esa aplicación que descargamos es realmente gratuita?


La respuesta es no. Nos están pagando con datos que proporcionamos, nuestros detalles personales, que previamente hemos aceptado para que ellos los pueden usar bajo el paraguas de la confidencialidad. De este modo, esas empresas, públicas o privadas, tienen la oportunidad de definir y optimizar sus estrategias para aumentar sus ventas.


Estas empresas intentan buscar la ventaja analítica, adelantándose a sus competidores para ser más eficaces y conseguir mejores resultados con el análisis de los datos de sus potenciales clientes. Incluso existen páginas en internet que pagan por hacer encuestas y dar absolutamente todos los datos que te piden.


Gastan gran cantidad de recursos económicos para adquirir hardware de alto rendimiento y software integrado, para aprovechar el auge tecnológico con el fin de almacenar y automatizar los datos a un menor coste. Incluso hay algunas cuya labor primordial es vender todo este tipo de información.


¿Y a nosotros? 

¿Quién nos prepara para protegernos?



A todos nos preocupa la privacidad, pero realmente nadie nos ha preparado para hacerlo. Y normalmente no recurrimos si vemos que una empresa de publicidad ha incumplido con esta normativa, bombardeándonos a spams sin respetar nuestros derechos. Habitualmente boqueamos o ponemos en correo no deseado y ya está.


Existe una agencia pública que es la autoridad encargada velar por el cumplimiento de esta normativa sobre la seguridad de los datos privados: La Agencia Española de Protección de Datos (AEPD).


Lo cierto es que hoy en día los centros universitarios están adaptando sus programas a los nuevos modelos de aprendizaje en Big Data, puesto que en el ámbito laboral es cada vez más demandado.


Pero en los centros de enseñanza la preocupación de las asociaciones de madres y padres de alumnos se centra en otras actividades. El profesorado se limita a dar unas pautas en el aula para no entrar en ciertas páginas o a no aceptar el envío de notificaciones de las mismas. Se pide el consentimiento de las familias para el tratamiento de los datos, pero no se prepara a los alumnos para proteger activamente su derecho a la intimidad. Aquí existe una laguna formativa que la administración tiene que llenar. 


Los datos obtenidos a través del Informe Pisa son, por ejemplo, aportes que han pasado de servir para evaluar las debilidades y fortalezas de los sistemas educativos, a una liga por encabezar las mejores puntuaciones. Dejando en un segundo plano, por la propia recogida de sus datos, habilidades fundamentales que demandan todas las empresas actuales como el liderazgo, el pensamiento creativo, o las habilidades y destrezas motrices.


El gobierno tiene que centralizar y usar todas estas informaciones de forma eficaz para mejorar el sistema educativo, ¡eso está claro! Los propios centros tienen que aprovechar los conocimientos Big Data para llegar a una educación más eficaz centrada en el alumno particular; es decir, llegar a la enseñanza personalizada, que aproveche las potencialidades y talentos de cada alumno. Pero también, y es el objetivo de este artículo, tiene que transmitir a los estudiantes, incluyendo en el currículo académico de los mismos, la capacitación adecuada para defenderse de esta transferencia abusiva de todo tipo de información a terceros.

Jon Alonso

1 comentario:

  1. Es un post de lo mas interesante y esta explicado de forma clara. Muy buen blog.

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